El FC Barcelona cerró su gira asiática con un espectáculo de goles en Seúl, derrotando 7-3 al FC Seoul en un amistoso que tuvo de todo: goles vistosos, rotaciones atrevidas y destellos del nuevo Barça de Hansi Flick. Pero más allá del abultado resultado, los focos del postpartido apuntaron a un tema más espinoso, el futuro de Marc-André ter Stegen como capitán del equipo.
En las últimas semanas, han circulado versiones que apuntan a un posible malestar dentro del club respecto a ciertas actitudes de Ter Stegen, lo que habría abierto la puerta a replantearse su capitanía.
De Jong, sin titubear, mostró un apoyo total a su compañero:
“Para mí, Marc es el capitán del equipo, como lo fue la temporada pasada. Es un jugador de clase mundial y siempre ha dado todo por este club. Lo apoyo mucho, y por lo que sé, el equipo también”, declaró ante los medios.
Sus palabras no solo reflejan unidad, sino también un intento de calmar las aguas en un vestuario que ha vivido demasiados cambios en poco tiempo: nuevo entrenador, salidas importantes, fichajes por definir, y ahora, la sombra de una crisis de liderazgo.
El tema se volvió más delicado con la llegada de Joan García. Preguntado sobre cómo tomó Ter Stegen la incorporación del nuevo arquero, De Jong fue prudente:
“No lo sé, habría que preguntarle a él”, respondió. Eso sí, no dejó pasar la ocasión para elogiar al recién llegado, asegurando que tiene “mucha calidad”.
La escena resume bien el momento que vive el Barça. Mientras en lo deportivo el equipo parece soltarse y divertirse en estos amistosos, internamente aún hay varias piezas por encajar. Ter Stegen, que venía siendo un pilar no solo en el campo, sino también en el vestuario, enfrenta un escenario inusual: mantenerse como líder mientras está ausente físicamente y con rumores que lo rodean.
Además, Frenkie aprovechó la entrevista para dejar claro que su renovación está muy cerca:
“En condiciones normales, habrá una extensión de contrato. Estoy feliz en Barcelona y, hasta donde sé, el club también está contento conmigo”, comentó con una sonrisa. Una gran noticia para la afición culé, que ve en él a uno de los pilares del nuevo proyecto.
Mientras tanto, Hansi Flick toma nota. El técnico alemán ha insistido desde su llegada en la necesidad de recuperar el espíritu competitivo del equipo, pero también la estabilidad emocional.
Y eso empieza, inevitablemente, por la jerarquía interna. Si Ter Stegen sigue como capitán o no, será una decisión técnica e institucional, pero lo que está claro es que dentro del grupo todavía cuenta con apoyos importantes.
El Barça se prepara ahora para su próximo compromiso de pretemporada, aunque es evidente que el verdadero partido se juega puertas adentro. Y en esa cancha, las declaraciones de Frenkie de Jong valen más que un gol.
